Ha pasado menos de un mes desde que despedimos a nuestros visitantes de Alemania, y ya estamos deseando que empiece el siguiente curso para volver a organizar nuestro intercambio con nuestros compañeros alemanes del colegio de Walldorf.

A continuación os contamos la crónica de su inolvidable visita:

El pasado jueves 14 de junio, 18 de nuestros alumnos, junto con su profesora de alemán Natalia Miguel, recibimos en el aeropuerto de Santiago a nuestros 23 amigos alemanes y sus dos profesoras de español, Frau Schumacher y Frau Mendel, procedentes de Frankurt, con pancartas de bienvenida y mucha ilusión.

Pasamos ese primer día en Santiago de Compostela, visitando la catedral y su casco histórico, y comimos en “Casa Manolo”, un lugar muy acogedor cuyo dueño nos atendió muy amablemente. Ya por la tarde, volvimos a Coruña para enseñar a nuestros invitados el que iba a ser su hogar durante los próximos 8 días.

Al día siguiente, mientras los alumnos disfrutaron de la obra teatral “Besos, canciones y una terapia de grupo” y participaron de las clases con sus alumnos españoles de intercambio.

El fin de semana, cada alumno se organizó para mostrarles la ciudad y alrededores: Finisterre, la cascada del Ézaro, Muxía, … todas las familias se esmeraron al máximo enseñándoles lo mas típico, así como la gastronomía de nuestra tierra.

El lunes 18 realizamos un tour por el centro de A Coruña, descubriendo lugares tan importantes como la Plaza de Lugo, la Calle Real, la Plaza de María Pita… dejando la visita de la torre de Hércules y la Casa de los Peces para el martes 19, otro día increíblemente perfecto, como lo tildaron nuestros visitantes germanos.

El miercoles 20, atendiendo a su deseo, realizaron un curso de surf en la playa de Bastiagueiro. La escuela Prado Surf consiguió que la experiencia fuera única.  Sin duda repetiremos.

El jueves 21 tuvieron la mañana libre, y por la tarde pudimos disfrutar de la exhibición de los alumnos españoles de la Escuela de Danza Liceo la Paz en el Teatro Rosalía de Castro. Para acabar la velada y nuestra increíble experiencia, celebramos una cena de despedida en el restaurante Cambalache de la Plaza de María Pita.

El viernes día 22 por la mañana, nuestros amigos de intercambio tomaban el autobús para volver al aeropuerto de Santiago y coger el avión de vuelta a su hogar. La despedida fue tremendamente emotiva: españoles, alemanes, alumnos, padres, profesores… todos lloraban, sintiendo gran tristeza al despedirse de sus nuevos amigos.

Tanto padres como alumnos coincidieron en calificar este intercambio como una gran experiencia que deberíamos vivir todos. Tanto es así, que ya podemos adelantar que a principios de octubre tendrá lugar la reunión para organizar el siguiente intercambio 2019.

Hasta ese momento… Glücklicher Sommer! (¡Feliz verano!)