Nuestros socios de Polonia, Italia y Reino Unido llegaron el pasado lunes 18 de julio a la ciudad de A Coruña para seguir trabajando en las actividades diseñadas para el Proyecto Europeo Let’s Teach Europe financiado por la Comunidad Europea a través de Erasmus+.
A lo largo de la semana estuvimos realizando diferentes actividades relacionadas con el Patrimonio Cultural Gallego y Español. Entre ellos, podemos destacar el Concurso de Selfies por el casco antiguo de A Coruña y por el Camino Inglés a Santiago de Compostela; la visita turística a la Torre de Hércules catalogada como Patrimonio de la Humanidad en 2009; la finalización del último tramo del Camino de Santiago -también patrimonio inmaterial- desde el Monte do Gozo hasta la Plaza del Obradoiro, donde se encuentra la Catedral; la formación teórica en “Culturally Responsive Teaching” impartida por la Coordinadora Erasmus y doctoranda Jennifer Meléndez Luces; y la participación en la Feria Medieval “Feira das Marabillas” que tiene lugar en el casco antiguo de A Coruña, entre otros.
Profundicemos ahora en las actividades organizadas por la organización anfitriona en A Coruña:
Lunes 18 de julio:
Nuestros participantes llegaron el 18 de julio a nuestra Escuela. Como la mayoría de ellos llegaron por la tarde, no se realizaron actividades. Mientras tanto, los participantes aprovecharon su tiempo libre para pasear por el barrio de Matogrande, donde se encuentra la escuela.
Martes 19 de julio:
Antes de iniciar las actividades relacionadas con el patrimonio cultural, los participantes fueron invitados al salón de actos del colegio para recibir una presentación sobre la historia del Centro Liceo La Paz, así como la filosofía de trabajo de nuestro Centro. Una vez finalizada la presentación, se entregó a los participantes un pack de bienvenida (bolsos de mano obsequiados por Xacobeo 21-22, bolígrafos, cuadernos, mapas de las ciudades de A Coruña y Santiago de Compostela, folletos de información turística y cuadernillos con información sobre nuestro colegio, entre otros). El siguiente paso fue visitar las instalaciones del Centro, como las aulas, los patios infantiles, la huerta, las pistas deportivas, el comedor escolar y la piscina.
Tras visitar la escuela, nuestros participantes cogieron el autobús urbano para llegar al centro de la ciudad donde les esperaba la primera actividad educativa: un concurso de selfies sobre la historia del Camino Inglés a Santiago por el casco antiguo de A Coruña. El concurso de selfies tuvo como punto de partida la Marina también conocida como “Cidade de Cristal”. A partir de ahí, los estudiantes tenían que seguir diferentes pistas y preguntar a la gente cuál era su próxima parada.
Para demostrar que eran capaces de encontrar las diferentes ubicaciones, los participantes debían hacerse selfies y enviarlas a los Coordinadores Erasmus junto con las respuestas a las preguntas planteadas. Entre los lugares visitados podemos destacar el Castillo de San Antón, el Museo Militar, los Jardines de San Carlos, el Convento de Santo Domingo, el Convento de las Bárbaras, la Casa de María Pita, el Pazo de Cornide, la Plaza de Azcárraga, la Iglesia de Santiago, la Puerta Real y la Plaza de María Pita.
Enhorabuena a Francesca, Mark, Sofía y James que fueron los ganadores de nuestro Concurso de Selfies!!
Una vez terminado el juego, los participantes almorzaron juntos en el restaurante Nova Ría. Allí pudieron degustar platos tradicionales gallegos como mejillones, berberechos, pulpo, calamares, chipirones, tortilla de Betanzos, croca, raxo, pimientos de Padrón, tarta de Santiago, tarta de la abuela y Tarta de queso. Todo ello acompañado de sangría, Estrella Galicia y agua. Sin olvidar el tradicional café de pota de Galicia.
Después de la sobremesa, todos caminamos hacia la Torre de Hércules. Una vez allí, los guías ofrecieron una breve introducción histórica al monumento y subimos hasta lo alto de la torre. Las vistas desde la torre son: al este vemos el canal de entrada a la ría de A Coruña, al noreste el puerto exterior de Ferrol, al suroeste el acuario de A Coruña, la playa de Las Lapas y la cala de Riazor y al oeste el Monte de San Pedro, y antiguo recinto militar.
Una vez abajo, los participantes caminaron hacia la brújula también conocida como “Rosa de los Vientos”. La rosa de los vientos es una obra de arte de Xabier Correa, de 1994. Para entender la representación de esta obra nos remontamos a Breogán. Su hijo vio desde lo alto de la torre una luz esmeralda, verde y tierras lejanas, las de Irlanda, y decide partir para conquistarla, pero fracasó en el intento y murió cuando los gobernantes locales le emboscaron, los Tuatha Dé Danann después de romper una tregua. La Rosa de los Vientos recoge todas aquellas tradiciones que surgirán de esta leyenda. Representa, por un lado, una carta náutica, donde tenemos el norte marcado con una flecha negra, que es donde supuestamente zarpa la invasión Mil Espàiner y que si recorriéramos 900km en línea recta llegaríamos a la costa de Irlanda; y por otro representa la mitología celta del Atlántico Norte. En ella, y a través de los ocho cuadrantes en que se divide, están representados los países celtas que habían conquistado «los milesios», Galicia, Escocia, Gales, Cornualles, Isla de Man, Irlanda y Bretaña. En la rosa están los nombres de cada nación y su nombre en gaélico en la parte superior.
Miércoles 20 de julio:
El miércoles nos recogió un autobús a las 7 de la mañana para llevarnos al Monte do Gozo. Una vez allí desayunamos en el comedor de peregrinos para coger energías para poder hacer el último tramo del camino de Santiago. Antes de emprender el camino hacia la ciudad, caminamos hacia un monumento erigido en la montaña en reconocimiento a todos los peregrinos que hicieron, hacen y siguen haciendo el camino. Ya que, desde allí, es posible ver -en el horizonte- la parte superior de la Catedral. Este hecho, poder vislumbrar los tejados de la Catedral, es la razón por la que la Montaña recibe el nombre de “Gozo” ya que tras muchos kilómetros, cuando los peregrinos llegan a este punto, la vista les devuelve la alegría y la energía para seguir adelante.
En la bajada pudimos ver los mojones que identifican los kilómetros que faltan para llegar a la Catedral. Todos ellos incorporan la concha que representa el camino y la flecha amarilla que señala la dirección que debe seguir el peregrino. Mientras caminaban, nuestros participantes fueron invitados a contar historias y leyendas tradicionales de sus países en un intento de emular los Cuentos de Canterbury.
Posteriormente, y tras 4km, todos los participantes llegaron a la Plaza del Obradoiro donde pudieron hacerse con la preciosa estampa de la fachada de la Catedral de Santiago. Tras llegar allí, los participantes fueron trasladados al Museo del Peregrino donde recibieron información sobre los diferentes peregrinos del mundo – como el Kumado Kodo (Camino Japonés) – así como información sobre las diferentes formas en las que Santiago ha sido representado en el arte: Santiago Apóstol, Santiago Peregrino y Santiago Caballero. Además, desde el piso más alto del museo pudimos admirar los tejados de la Catedral, que tuvimos la oportunidad de visitar más tarde. Tras la visita, nos dirigimos al restaurante donde almorzamos, Casa Manolo, conocida como “la otra catedral”, ya que ha sido protección y remedio de peregrinos de todas las latitudes, refugio de almas perdidas en el Camino y felizmente redescubiertas entre las mesas y fogones del mítico restaurante y de Santiago. Es, para muchos, el último contacto real con el Camino de Santiago antes del duro regreso, el último abrazo, el penúltimo Buen Camino.
Café, canciones, cuentos y juegos tuvieron lugar un poco más tarde tras cruzar el callejón cercano a la Plaza de la Inmaculada y llegar al precioso jardín-terraza del Hotel Costa Vella. Escondidos del sol bajo las parras y parasoles, compartimos experiencias, nos divertimos juntos y nos mezclamos con personas de otras culturas que han vivido el camino. Situado en Porta da Pena, este hotel inició su andadura en 1999 en un edificio de arquitectura tradicional que llevaba quince años abandonado. El jardín llama la atención a primera vista, con las mesas bajo los árboles, una enredadera cubriendo un lateral, vistas de la Costa Vella y San Francisco desde el muro que comparte con San Martín Pinario o una fuente situada en el centro del terreno, que suele estar rodeada de manzanas de los árboles cercanos.
Por la tarde, sobre las 18:00 h, fuimos a visitar la Torre Berenguela y la Azotea de la Catedral. La torre de Berenguela fue construida en 1318 por el arzobispo Berenguel de Landoira (de ahí su nombre) para defender la Catedral. Trescientos años después, en el citado rediseño de Andrade, se le añadió un elegante acabado barroco. En la cima de la Berenguela hay tres elementos:
• La campana principal de la Catedral. Originalmente existía otra también conocida como Berenguela, de casi 10 toneladas de peso, que fue sustituida en 1989.
• El reloj, añadido en el siglo XIX.
• La protagonista de este artículo: la linterna diseñada por Andrade.
La linterna de Berenguela fue diseñada para marcar el lugar de la tumba de Santiago por la noche. Es decir, actuaba como un faro invertido: no había que huir de él sino acercarse a él. El farol de la Torre del Reloj de la Catedral de Santiago se enciende el primer día de cada año jacobeo y permanece así hasta el final del Año Santo.
Jueves 21 de julio:
El jueves 21 de julio por la mañana, se llevó a cabo la sesión de formación sobre «Engaging Ethic-Diverse Students: A Research Based on Culturally Responsive Teaching for Roma-Gypsy Students«. Los estudiantes tuvieron la oportunidad de reflexionar sobre los métodos para incluir a los grupos minoritarios dentro del aula y cómo los antecedentes culturales y el patrimonio cultural de cada grupo minoritario influyen en su proceso de aprendizaje.
Tras la formación, almorzamos todos juntos en el comedor del colegio y después nos dirigimos al casco antiguo de A Coruña para disfrutar de la preciosa Feria Medieval. Durante la Feria Medieval, el arte y la fantasía de la Edad Media inundaron el casco antiguo de la villa herculina donde las calles se llenan de malabaristas, titiriteros, puestos de artesanía, puestos de comida, conciertos, torneos y otras actividades para la ocasión.
La feria también cuenta con un espacio dedicado exclusivamente a los niños con juegos y talleres, y también hay espectáculos de calle. En la Feria Medieval también es habitual encontrarse con personajes de la época: malabaristas, bufones y titiriteros que animan al visitante con su espíritu alegre y desenfadado, con numerosos artesanos que exhiben sus bellos objetos en los puestos habilitados para la ocasión. Tras cenar en la Feria Medieval y probar la comida típica, se reunieron alrededor del colegio para despedirse.
¡Fue una experiencia maravillosa y estamos deseando disfrutar de la próxima movilidad en Polonia!
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